Miscelánea – Sección Poema
Sergio Emiliano Mancinas Fontalvo

Montañas y planicies por igual, desde la conquista tiene su origen, el apetito voraz no se ha menguado, se busca y se encuentra en tus entrañas el precioso de tu glamur. Abro los cerros y rompo las montañas, prospecto tus venas y me cercioro con matraces, porque sé que vas a estar ahí. Galerías van y galerías vienen, pozos suben y pozos bajan te extraigo con sinfónicos ritmos de aceros que con rotar y percutir puedo de síncrona manera avanza con la sabia química de Nobel.
Extraigo, muelo, separo y fundo, se labro con artísticas manos en siluetas de caprichosas formas, se muestra en vitrinas y se lucen en delicados rostros. Soy sustento a los fondos económicos del mundo.
Pero que he dejado atrás, lixiviados en presas de jales, quizá lluvias pertinaces provoquen sus deslaves o bien los torrentes de ríos que lloren su pesar, es la carga tan grande que la Ley del Gran, Yo Soy y que fue vulnerada, el señoreo sobre el hábitat solo fue un precepto quebrantado. Me volteo y veo tu obstinación, veo que lo lograste, observo tu avidez y tu codicia.
¿Y tú que con que me has pagado?, gimen las montañas…Socavones, galerías y lumbreras todas por igual saqueados e inundados y ¿dónde están aquellos que irrumpieron mi silencio?, ¿dónde están aquellos que alteraron mi armonía? los busco y no los hallo. No hay respuesta, la afrenta está hecha. Solo los cielos y la tierra testigos son de tu codicia.
La respuesta al final es: un todo está aquí y ese todo seguirá estando.